Después de
aplicarnos la crema hidratante en el rostro y la base, el paso que sigue es
aplicar el corrector.
Es muy importante
saber qué tono elegir y como aplicar el corrector
en un maquillaje, ya que con él se puede estropear el efecto final de éste.
Una cosa muy
importante a saber es que los correctores, no sólo se usan para disimular las
ojeras, sino que también lo podemos utilizar para disimular pequeñas rojeces,
espinillas, venas, cubrir cicatrices y tatuajes.
Los correctores, al
igual que las bases de maquillajes, los encontramos en diferentes colores y
texturas: líquidos, cremosos y en barra.
El corrector líquido es el más usado para corregir las ojeras, tiene cobertura media y es fácil de aplicar. Los correctores en crema y en barra tienen una cobertura más densa y se usan en correctores de colores y cuando las ojeras son muy marcadas.
El corrector líquido es el más usado para corregir las ojeras, tiene cobertura media y es fácil de aplicar. Los correctores en crema y en barra tienen una cobertura más densa y se usan en correctores de colores y cuando las ojeras son muy marcadas.
CORRECTOR LIQUIDO
CORRECTOR CREMOSO
CORRECTOR EN BARRA
El corrector ideal
para las ojeras es el del color de la piel o un tono más claro que la base de
maquillaje. Si tienes bolsas bajo los ojos es preferible usar un corrector en
el mismo tono de tu piel.
Ten atención si te
aplica un corrector demasiado claro, ya que tendrás el efecto llamado
"ojos de mapache" y no se verá muy bien.
Para tapar las
rojeces o espinillas, lo ideal es utilizar un corrector de color verde, verás
como el rojo de estas partes enrojecidas desaparece. Tiene que utilizar sólo
una gota porque este color crea sombra aun cuando se cubra con base.
Como aplicar el corrector:
Comenzamos aplicando
el corrector para disimular aquella pequeñas imperfecciones que podemos tener
en la piel. Por ejemplo, algunos granitos, pequeñas rojeces, etc. Utilizamos
muy poco producto para que no se note. Lo aplicamos con una brocha para luego difuminarlo
con la yema de los dedos para que el producto penetre en la piel y se funda.
El siguiente paso es
difuminar la zona de la ojera. Vamos marcando con el corrector toda la zona de
la ojera y también pasaremos por el nacimiento de las pestañas…una zona que
solemos olvidar normalmente.
Seguimos aplicando
el corrector en todo el parpados y también en el nacimiento de las pestañas.
Difuminamos poco a
poco con la brocha y después con la yema de los dedos.
Repetimos el mismo
paso con el otro ojo.
Por ultimo fijamos
todo con polvos sueltos translucidos. Esto nos ayudará a que estas correcciones
se mantenga por más tiempo.
IMPORTANTE NO CONFUNDIR EL CORRECTOR CON EL ILUMINADOR
- El corrector: como su propio nombre indica, sirve para corregir defectos. Lo podemos aplicar sobre granitos, cicatrices, ojeras, lunares, marcas...Se utiliza sobre la base de maquillaje directamente en aquella zona que queremos ocultar (granitos, espinillas, etc.)
con pequeños toques que daremos con el dedo. Cuando llegues a la zona del contorno de ojos debes de tener mucho cuidado y extenderlo solo en la ojera o zona oscura que quieras disimular.
- El iluminador: así como su nombre lo dice...sirve para iluminar las zonas en las cuales viene aplicado. Se utiliza en zonas concretas en pequeños toques para dar vida al rostro: el arco de la ceja, sobre la mejilla, la punta de la nariz, las sienes o la barbilla. Continene pigmentos que atraen la luz. Se aplica al terminar el maquillaje como toque final.